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El proyecto de ampliación para el Tigre Delta Hostel contó desde el comienzo con una serie de restricciones que lo convirtieron en un encargo desafiante. La principal fue el presupuesto, lo cual llevó a intentar conservar la mayor cantidad de superficie posible, llegando a construir solo 30 m 2 nuevos. El proyecto se divide en dos partes: al frente, el hotel con habitaciones con baño privado, y al fondo, un sector con dos grandes habitaciones con camas marineras y baños exteriores. Un añoso ficus atraviesa la plataforma de acceso y tamiza la entrada a estos.
La cocina-comedor también da al jardín y se utiliza para servir el desayuno y para que los huéspedes puedan prepararse sus comidas.